El término de Alcalá del Júcar II

El término de Alcalá del Júcar (2)
El río Júcar corre por un lecho profundo abierto a través de los peñascos y laderas escarpadas. Pese a que las raíces de innumerables olmos colocados en sus márgenes, podrían actuar como diques, los desbordamientos suelen causar grandes daños. Las aguas deí río, tomadas por medio de cinco presas, riegan la fértil aunque estrecha vega que, al igual que las de Jórquera y Villa de Ves, datan sin duda del tiempo de los árabes. Las cinco presas mencionadas anteriormente están situadas en el pueblo de La Recueja (la superior), otra sobre el puente de Alcalá, y tres más abajo, en las huertas de Pardo y en los molinos de la aldea de Tolosa y Don Benito.

A la derecha del río, en su parte superior y al Oeste de la población (a tres kilómetros), se encuentra la ermita de San Lorenzo: el sitio es delicioso; domina una gran porción de la pintoresca ribera y, por él, desemboca en el Júcar la rambla de San Lorenzo, caudalosa en tiempo de lluvias, próxima a la cual hay una fuente de exquisita agua, y un pozo llamado Pocico Ochando, que antiguamente servía de abrevadero para los ganados, y que se halla en el camino que conduce a Villavaliente. También se encuentra a la derecha del río, la Casa del Cabezo, en suelo cortado de regueros y barrancos, con un pozo que la surte de agua, y Los Pumarejos, qué son unos
huertos abiertos entre quebraduras y vallejos, y que regados con el agua abundante de dos fuen- tes, crían buenos olmos y árboles finatales. Entre los manantiales, que podríamos adscribir a la villa, destacan las denominadas “Fuentecillas”, las cuales se sitúan tras la peña, junto a las huertas de Santiago el de La Perola; también el Berrocal es famoso por sus aguas.
Fuster Ruíz, desde una perspectiva fundamentalmente histórica, trató de racionalizar la ordenación del territorio albacetense, suprimiendo para ello bastantes ayuntamientos y haciendo una concentración de términos municipales. La integración ideal de municipios en nuestra comarca, siguiendo a este autor, podría estar formada de la siguiente manera:
1. – Casas Ibañez: Alborea, Casas Ibañez, Villamalea y Villatoya, con una superficie de 326 kms2 y una población de 8.564 habitantes en 1975 y de 8.050 en 1991.
2. – Mahora: Abengibre, Cenizate, Fuentealbilla, Golosalvo, Mahora, Motilleja y Navas de Jorquera, con 413 kms2,7.226 habitantes en 1975 y 6.422 en 1991.
3. – Alcalá de Júcar. Alatoz, Alcalá del Júcar, Balsa de Ves, Carcelén, Casas de Ves y Villa de Ves, con 450 kms2 y 6.679 habitantes en el año 1975. En 1991 contaba con 4.344 pobla¬dores.
4. – Casas de Juan Núñez: Casas de Juan Núñez, Valdeganga, Jorquera, La Recueja, Vi- llavaliente y Pozo Lorente, con 355 kms2 y con 6.475 habitantes para 1975y 5.110 en 1991.
Para terminar este apartado referido al término municipal, bien podríamos recordar las palabras de A. Martorell, quien en 1878 escribía acerca de nuestra comarca: “Difícil seria dar una idea de las bellezas panorámicas, geológicas y de vegetación que ofrece el dilatadísimo y accidentado valle del Júcar: los más empinados riscos, las mas altas cortaduras (…) y otros muchos objetos de atónita admiración, eran variados espectáculos que llevaban nuestro ánimo suspenso de maravilla en maravilla. (…) El espectáculo de lo sublime ha sido la inmediata compensación de las fatigas inherentes á nuestra larga y especial peregrinación por tan es¬carpados y peligrosos caminos«.
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